El Sevilla vuelve a las andadas. Vuelve el presionar arriba. Vuelve el jugar con electricidad en las bandas. Vuelve el jugar con rapidez, tocando y dejando tocado al rival. Vuelve la ‘naranja mecánica’ del año 06/07. Pero ahora es una auténtica trituradora. En 45 minutos deja K.O. al rival. Al descanso ya iban 0-3. El Athletic no podía hacer nada. El juego del Sevilla era un espectáculo. El Sevilla llegaba pero no lograba el cuarto. Hasta que Negredo se sacó un pase de la chistera que aprovechó Navas para colocar el balón lejos del alcance de Gorka. Y aquí acaba el partido. Aunque no lo parezca, el Madrid y el Barça temen a un nuevo rival. El rival que pulverizó al Zaragoza. Que pulverizó al Unirea. Que pulverizó al Osasuna. Que pulverizó al Mallorca. Y que acaba de pulverizar al Athletic. Tras esto, el Sevilla ha dado un golpe de autoridad importante. Ha puesto las cartas sobre la mesa. Los de Jiménez han dejado claro que esta Liga no va a ser cosa de dos.